Leer la encuesta del CIS con las gafas adecuadas

Apenas he tenido tiempo de revisar el barómetro del CIS del mes de Julio, que se ha hecho público hoy. Pero mirando algunos datos por encima, quería contribuir con algunas pinceladas para ayudar a leerla, sobre todo en lo relativo a estimaciones y perspectivas electorales.  Existen otros indicadores sumamente interesantes que cabría analizar, pero me limitaré a lo que he podido mirar un poco.

Obviamente a quien esté acostumbrado a hacerlo le parecerán obviedades, pero quizá para gente no habituada le puedan servir:

  1. En primer lugar, es bueno fijarse en la fecha del "trabajo de campo" de la encuesta, es decir, cuándo han sido preguntadas las personas que han respondido. Ha sido realizada del 2 al 10 de Julio, después de la petición de rescate, pero antes del "Viernes 13" en que se anunció el mayor aluvión de recortes y de las multitudinarias manifestaciones del 19J o la continua movilización de funcionariado y otros colectivos en la calle de estas últimas semanas.
  2. En segundo lugar, conviene no fijarse demasiado en el dato de estimación de voto, que es el que más se suele difundir y es un cálculo aproximativo a partir de distintas variables. Nos dice mucho más la intención directa de voto (declaración expresa de a quién votarías mañana) y, sobre todo, es necesario leer esos datos en perspectiva, comparándolos con encuestas anteriores. Esto es así en general, pero es decisivo en un momento como este. Los cambios se producen tan rápidamente y hay una volatilidad tan grande que es imposible estimar correctamente. Luego lo explico mejor.
  3. Ojo con los titulares de los medios. La noticia no es que el PP ganaría las elecciones, ni que el PSOE le recorta distancia. La noticia es, en esta y en todas las encuestas que se están publicando, que el PP se desploma a una velocidad casi nunca vista (lo de UCD fue espectacular), pero sobre todo, que el PSOE no recoge absolutamente nada. Nunca se había producido un fenómeno así. Por eso es bueno mirar los datos de ambos partidos sumados para evaluar este fenómeno.
  4. Pocas veces el CIS ha estimado al PP por debajo del 40%. Y pocas al PSOE por debajo del 30%. Nunca ambas cosas a la vez, hasta hoy. La suma de ambos partidos es la más baja desde que ambos se consolidaron como alternativas de gobierno. Otros datos como la confianza en los líderes son terribles para los dos y sumamente preocupantes para el PSOE, ya que Rubalcaba genera aún menos confianza.
  5. En intención de voto directa, el PP pierde 6 puntos desde abril. El PSOE, 3,7. El PP está en su mínimo histórico y el PSOE al nivel de 2000 tras la derrota de Almunia. La suma en intención directa de ambos en abril era de casi el 50% de todas las personas que respondían a la encuesta, incluidas las que decían que no votarían. A día de hoy es apenas el 35%, casi 15 puntos menos. Casi todo lo pierde el PP, pero el PSOE no remonta, e incluso pierde un poco.
  6. Otro dato impresionante: el porcentaje de personas que declaran expresamente que se abstendrían sube a una velocidad impresionante (13 puntos desde octubre) y por primera vez supera el 20% (22,3%). No solo eso, sino que la abstención sería "primera fuerza política", 4 puntos por delante del PP. Jamás se había producido ese fenómeno en la encuesta del CIS.
  7. Todo esto apunta a un momento de tanta volatilidad que resulta muy difícil hacer estimaciones de voto. Para hacer la denominada "cocina" de las encuestas, es necesario contar con otra serie de variables que nos pueden indicar cómo podría ser el reparto final del voto. Por ejemplo, hay que estimar cuánta participación habrá. ¿Cómo estimarlo cuando la abstención declarada da esos bandazos que no se habían visto hasta ahora? O también hay que determinar a dónde puede ir el voto de las personas indecisas, que no señalan a ningún partido expresamente en la encuesta. ¿Cómo "repartirlos" cuando lo habitual es que el grueso se lo lleven PP y PSOE si estos presentan una evolución sin precedentes?
Estamos en una situación absolutamente impredecible. Eso no quiere decir que vaya a producirse necesariamente un seísmo en el escenario electoral. Pero sí que nos indica que leer las encuestas hoy de la misma manera que hace uno o dos años es un error.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Mi pregunta Juan ,después de leer su interesante análisis , es muy sencilla :
Estos resultados son necesariamente peligrosos ¿no?
Gracias.
Anónimo ha dicho que…
Fundamentalmente porque ganaría de nuevo uno de los dos.
Anónimo ha dicho que…
LO QUE EL PUEBLO NO ENTIENDE ES QUE SI NO VOTAN SIEMPRE GANARAN LOS MISMOS, HAY QUE VOTAR PERO A PARTIDOS MINORITARIOS...
Juan Peña ha dicho que…
Bueno, es muy difícil no prever que ganará uno de los dos partidos mayoritarios, al menos a día de hoy. El bipartidismo ha oscilado entre los 282 diputados de 1989 y los 323 de 2008. Y en las últimas elecciones, que fueron "antesdeayer", casi 3 de cada 4 personas que votaron lo hicieron por PP y PSOE. Las cosas están cambiando muy rápido, pero tanto como para que eso se desmorone en 9 meses es imposible.

El único caso reciente de debacle (parcial) de un sistema bipartidista europeo ha sido el de Grecia y para ello han pasado por fases que en este país no se han dado: desercios de diputados del bipartidismo, gobierno de concentración, doble rescate, etc. Y aún así, aunque el PASOK sí se ha hundido tras venir de mayoría absoluta, Nea Demokratia ha resistido.

Ahora bien, lo novedoso en este caso es la ruptura de una idea instalada en la cabeza muchas personas de que lo que estropeaba uno lo arreglaba el siguiente, con lo que la alternancia era una buena idea. Es decir, visto de una manera simplista el PSOE parecía mal gestor económico y el PP de Aznar quedó como el salvador en los últimos 90. Y a su vez el PP apareció como una amenaza para los derechos sociales y las libertades y el primer gobierno de Zapatero deshizo el entuerto.

Sin embargo, ahora la sensación que queda es que ni uno ni otro son capaces, ya no de sacarnos de la crisis, sino de hacer otra cosa distinta a la que se les impone desde otras instancias. Eso por el momento está generando desafección (¿para qué sirve que vote si no deciden?) y mucha desorientación para votantes que oscilaban entre una y otra opción. Pero veremos hacia dónde evoluciona en el futuro cercano.
Anónimo ha dicho que…
Mi humilde conclusión es que un sistema puramente representativo es una idea caduca,y así se empieza a apreciar.

Cualquier partido en el poder se revela amenaza, y, existiendo los medios tecnológicos que hoy tenemos, no es descabellado dar un salto hacia una Democracia más completa.

Proyectos no faltan, destaco uno: www.demo4punto0.net, en lo que parece una verdadera R+Evolución. Tan posible como necesaria.

Saludos!
Juan Peña ha dicho que…
Estoy de acuerdo en que existe una crisis de la representación política.

Pero, aunque estoy de acuerdo en las propuestas de profundización democrática como la de Democracia 4.0, creo que la crisis no se produce tanto por la falta de mecanismos formales como por la falta de resultados de la democracia.

Sobre este asunto de la legitimidad hablé el otro día ;)
Anónimo ha dicho que…
lo que hay que hacer, es cambiar este sistema de partitocracia, antes de morir el dictador en la cama lo dejo todo preparado y el sucesor suyo de llama el borbon, y despues el niño, por genetica, ese es el sistema y el otro que murio en la cama en cierto modo siguen sus doctrinas un poco disimuladas y diciendo que tenemos democracia, por que votamos cada 4 años,,,,,,
Anónimo ha dicho que…
Yo tengo una duda, bueno es más una preocupación que una duda, es la siguiente: en cuanto a lo de la democracia participativa directa, en plan D.4.0 o, democracia líquida. Votamos directamente, sí, pero quien propone? quien legisla? para eso se siguen necesitando los partidos, y cuanto más pluralidad mejor.
Anónimo ha dicho que…
No. La propuesta la puede realizar cualquiera. Similar a las actuales (e inútiles) ILP. No hay más pluralidad que la horizontalidad absoluta. Lee acerca de los diferentes sistemas de participación.
Joselito ha dicho que…
Los minoritarios, por ser minoritarios, no tienen porqué ser necesariamente buenas alternativas políticas. Solo aseguran eso, que son minoritarios.

El sistema en su conjunto está podrido hasta el tuetano. Deslegitimación a través de la abstención!!
Edu ha dicho que…
La abstención y el voto en blanco son la muerte de la democracia y una muestra de inmadurez social y política. Nadie está fuera de la sociedad. No votar es borrarse del espectro político y dejar sin poder a tu colectivo social. El sistema es imperfecto, pero negarse a participar votando no lo anula, todo lo contrario, legitima la continuidad de los que detentan ya el poder. En las próximas elecciones, ni un voto en blanco ni una abstención